Aprender a aprender
Aprender a aprender
En las organizaciones nos encontramos con la necesidad de estar continuamente aprendiendo, transformándonos para conseguir el propósito establecido. El reto está en aprender de cada situación, de cada reunión, de cada interacción, de cada proyecto.
No es sólo una cuestión de creer que puedo aprender, es también instalarnos en la emocionalidad que permita aprender a aprender, una mezcla entre humildad y asombro. La humildad que activa el aprendizaje ante cada situación y el asombro que despierta la curiosidad. Aprendemos a aprender cuando soltamos viejas estructuras y permitimos que el asombro y la humildad sean parte la estructura vincular en las organizaciones.
Aprendemos a aprender cuando permitimos que en los equipos se interconecte y se establezcan hábitos de entrega y recepción de feed-back auténtico y honesto. Aprendemos a aprender cuando en las organizaciones se permite parar de hacer para reflexionar y volver a la acción con nuevos hábitos. Aprendemos a aprender cuando confiamos en las personas de la organización y se posibilita la declaración de “no sé”, cuando nos detenemos para mirar con perspectiva, cuando reflexionamos sobre cómo se llevan a cabo las reuniones, los proyectos, las conversaciones y cuando todo lo señalado, se convierte en nuevos hábitos.
“Vive como si fueras a morir mañana, aprende como si fueras a vivir para siempre” Mahatma Gandhi