EL CEREBRO COMO ALIADO DEL LIDERAZGO
Hoy queremos hablaros de otra de las personas que nos inspiran y con la que esperamos poder contar en el espacio de Arteko Inspira. Se trata de Nazareth Castellanos, directora de investigación del laboratorio Nirakara y cátedra extraordinaria de midfulness y ciencias cognitivas de la Universidad Complutense de Madrid.
Nos gustaría compartir con vosotros y vosotras nuestra reflexión sobre la aplicación, al liderazgo y a las dinámicas de funcionamiento de los equipos, de lo aprendido en el curso «El Cerebro como Aliado» impartido por Nazareth sobre el funcionamiento del cerebro humano.
1.- Emociones. Es fundamental para el liderazgo aprender a gestionar las emociones de las personas del equipo y las generadas por el propio equipo como grupo.
Para ello Nazareth nos muestra algunas claves del funcionamiento del cerebro, muy valiosas para su aplicación en el liderazgo, tales como proporcionar experiencias positivas que compensen las negativas, gestionar las emociones que atrapan al cerebro y lo paralizan, aprender a responder en lugar de reaccionar ante una situación o saber cómo enfrentarse emocionalmente a un conflicto.
Pero además del conocimiento de las emociones, una mayor conciencia corporal propia es relevante para el liderazgo, ya que la conexión con el cuerpo facilita estar en el momento presente y, por tanto, sintonizar mejor con las emociones de los demás y conectar de una manera más profunda con los miembros del equipo.
La conexión con el cuerpo facilita estar en el momento presente y, por tanto, sintonizar mejor con las emociones de los demás
2. Comunicación. Conocer los procesos cerebrales implicados en la comunicación puede mejorar significativamente la forma de transmitir los mensajes. En una conversación, tanto la escucha como el habla, están interrelacionados y se influyen entre sí, utilizar un lenguaje claro y emocionalmente resonante puede lograr una mejor comprensión, motivación y conexión con el equipo.
Por otro lado, en la comunicación la conciencia corporal propia también juega un papel fundamental en el liderazgo. Como ya sabemos la comunicación no verbal genera un gran impacto en las conversaciones. Una postura abierta y segura puede generar confianza y seguridad en los miembros del equipo. Esta conciencia corporal permite ser más efectivos y establecer una mejor conexión emocional con los demás.
Utilizar un lenguaje claro y emocionalmente resonante puede lograr una mejor comprensión, motivación y conexión con el equipo
3. Gestión del estrés. Nazareth da mucha importancia a las consecuencias que el estrés genera en nuestra actividad diaria y cómo afecta el rendimiento cerebral. Un líder informado, una líder informada puede implementar estrategias para reducir el estrés en su equipo, promoviendo un ambiente de trabajo saludable que fomente la resiliencia y la creatividad. En la medida en la que sabemos que el “error” no va a ser castigado por la organización, va a permitir a los equipos desarrollar su creatividad de una manera exponencial y atreverse a hacer cosas diferentes que abran nuevos caminos.
Hay técnicas que integran el cuerpo para gestionar el estrés, como la respiración consciente y la atención plena (mindfulness). Estas prácticas ayudan a los y las líderes a mantener la calma y la claridad mental en situaciones desafiantes, lo que repercute positivamente en la atmósfera del equipo.
La respiración consciente y la atención plena (…) ayudan a los y las líderes a mantener la calma y la claridad mental en situaciones desafiantes
4. Fomento de la colaboración. Un buen liderazgo implica fomentar el sentido de pertenencia y colaboración dentro del equipo. Comprender cómo se activa el cerebro en situaciones sociales permite diseñar dinámicas que fortalezcan las relaciones interpersonales, lo que a su vez mejora el trabajo en equipo.
Uno de los rasgos que define a un equipo de alto desempeño es la impecabilidad en el cumplimiento de sus promesas y esto no es otra cosa más que una buena coordinación de acciones entre las personas que forman parte de un equipo y la colaboración entre departamentos, lo que a su vez, fomenta la confianza frente a la competición entre personas, áreas y departamentos.
Comprender cómo se activa el cerebro en situaciones sociales permite diseñar dinámicas que fortalezcan las relaciones interpersonales
5. Desarrollo del potencial individual. Al aplicar estrategias basadas en el conocimiento del cerebro, las personas líderes pueden identificar y potenciar las fortalezas individuales de los miembros del equipo. Esto no solo mejora la efectividad del grupo, sino que también, contribuye al crecimiento personal y profesional de cada integrante.
6. Promoción de bienestar integral. Las personas líderes que entienden la importancia del bienestar físico y emocional pueden fomentar prácticas saludables dentro de sus equipos. Esto incluye promover pausas activas, ejercicio o actividades grupales que integren tanto el cuerpo como la mente, creando un ambiente más equilibrado y productivo.
Las personas líderes que entienden la importancia del bienestar físico y emocional pueden fomentar prácticas saludables
En conclusión, el curso de Nazareth Castellanos nos está proporcionando herramientas valiosas que conectan la neurociencia con el liderazgo efectivo. Este enfoque holístico, lenguaje, cuerpo y emociones, nos permite acompañar mejor a las personas, a crear equipos más cohesionados y exitosos, y a generar entornos más motivadores y productivos, que permitan afrontar los desafíos más exigentes en cualquier organización.
Piedad Arbaiza Vilallonga
CEO. Arteko Consultoría